sábado, 17 de agosto de 2013

Graciela Cousinet y su reseña sobre el trotskismo

Por Eva Baez y Paul Lecea

Graciela Cousinet ha escrito una reivindicación de Trotsky destacable (aún cuando incurre en errores conceptuales y biográficos que no abordaremos en el esta respuesta)que contrasta con las interpretaciones políticas que extrae para el trotskismo en la Argentina y en la provincia. La operación de la decana de la Facultad de Ciencias Políticas de la Uncuyo es conocida: oponer los alumnos al maestro.

Para Cousinet, los 75mil mendocinos que vieron este domingo en el Frente de Izquierda, cuyos partidos que lo componen son de inspiración trotskista, votaron  “a un movimiento de clase media universitaria”, salvo “excepciones muy puntuales”, cuya propuesta programática  “es similar a la de los partidos que se sitúan en el espacio de la centro-izquierda.”. La verdad es que esta versión es equivocada hasta el hartazgo. Cousinet sigue en esto el camino de analistas como Marcelo Padilla, y muchos otros periodistas que tratan de explicarse el triunfo del FIT en las urnas por un voto “bronca” o “de clase media”, cuyos efectos ayuda a crear una izquierda ahora supuestamente “elogiada” por los medios de comunicación hegemónicos.
 Los términos del debate parecen estar bastante precisos: es necesario explicar el resultado electoral de la izquierda, pero sembrando la mayor cantidad de dudas posible de que el proceso de ruptura de masas que se vive con el kirchnerismo (lo que ella supo definir correctamente en su análisis electoral como crisis del peronismo), esté siendo capitalizado por  izquierda por el FIT. A propósito de esta crisis, Daniel James, autor del libro Resistencia e integración, el peronismo y la clase trabajadora en la Argentina, plantea, en el último número de la Revista Ideas de Izquierda, que el kirchnerismo no pudo renovar una corriente de militancia peronista en el movimiento obrero y que hoy “los que se oponen a la burocracia sindical peronista históricamente de derecha, no son los montoneros, sino la izquierda”.

Las luchas sociales, en las que la izquierda ha tenido una gran presencia durante los últimos años, también explica aquello que Cousinet expone jocosamente como un dato “de la jerga”: lo que es “troskear”. Lo que sucede es que la cultura política de la izquierda durante el último período se ha constituido por oposición a la opción posibilista en la que cayeron los partidos tradicionales, incluyendo el que ella representa. La presencia en la lucha de los trabajadores ha contribuido a una reactualización de las premisas bajo las cuales buscó el trotskismo fundar su proyecto político. Por eso se equivoca Cousinet en exponer al trotskismo de un modo extemporáneo, como si el mayor mérito de los trotskistas estuviese en rezar, no se sabe en nombre de qué creencias metafísicas, mejor que otros que, como Cousinet, hacen culto del eclecticismo teórico. Como ejemplo, el trotskismo fue el primer partido en la historia de Mendoza que llevó de candidato a un peón rural (José Soto), protagonista de la lucha de los trabajadores ajeros contra el trabajo esclavo y la explotación infantil, algo dejado totalmente de lado por los partidos “de la Mendoza conservadora” (¿verá en esto G.C. algún sesgo “de clase media”?). Mientras tanto, su partido integraba la lista del FAP que candidateó a Luis Leiva, quien colaboró con la fuga del genocida Otilio Romano. Ha estado también en la agenda del trotskismo la lucha por los derechos de las mujeres, haciendo notar, no desde esta histórica elección, sino desde 2009, cuando nuestra candidata Jazmín Jiménez centró su campaña en terminar con las muertes de mujeres por abortos clandestinos (mientras que el gobierno de Cobos le negó el derecho al aborto no punible a niñas de 12 y 13 años que habían sido violadas). Además el trotskismo es parte de las luchas docentes, estatales, de choferes, ambientales, industriales, etc. Es conocida la presencia del Frente de Izquierda, y en particular del PTS en las luchas de los trabajadores del SUBTE de Buenos Aires (Claudio Dellecarbonara), Zanón en Neuquén (Raúl Godoy, Diputado Ceramista del FIT en Neuquén), de la Alimentación (Hermosilla, del PTS, perseguido por el “Proyecto X”) y cientos y cientos de casos más entre los que quisiéramos nombrar a Alejandro Vilca, recolector de residuos y candidato que ubico al FIT como cuarta fuerza en Jujuy y a Hernán Puddu, obrero despedido de la automotriz Iveco y perseguido por la burocracia del SMATA.

¿A qué viene toda esta “mistificación”, del trotskismo? ¿Cuál es la intención de presentarlo como una secta de culto? ¿No será para esconder que en la Facultad de la que es decana, no hay una sola cátedra que tenga un capítulo de León Trotsky entre su bibliografía? ¿Será por estos mismos prejuicios, que a toda la política y la intelectualidad local le ha caído un balde de agua fría que “la secta de los trotskos” logre una adhesión de 76.328 votantes?

León Trotsky fue un dirigente revolucionario, cuyo legado puede encontrarse en la reactualización de las luchas que dan los trabajadores y los pueblos en el mundo entero. El trotskismo tiene mucho para decir acerca de la realidad viva y hace rato que lo está haciendo, estas elecciones así lo demuestran. Las masacres en Egipto o los fenómenos políticos de América Latina pueden ser encarados desde los textos de Trotsky en clave actual, buscando reactualizarse para ser un pensamiento en acción, por supuesto, siempre que se huya de las lecturas recitativas o de las revisiones que se contradicen con la historia. El PTS es el único partido que se abocó a esta labor, desde la década del ´90, poniendo en pie el Centro de Estudios, Investigaciones y Publicaciones “León Trotsky”. De la misma manera, en Mendoza inauguramos, pocos días antes de las elecciones, la Biblioteca Karl Marx, donde está, a disposición de todos los mendocinos, la obra de León Trotsky, que prácticamente no se consigue en ninguna biblioteca ni librería de la provincia. También hemos impulsado numerosos debates, charlas y cátedras en la Universidad de Cuyo, donde la misma Graciela Cousinet ha participado. Cabe preguntarse, ¿impulsará Cousinet incorporar el estudio (crítico por supuesto) de Trotsky en las cátedras de la Facultad de la que es decana o seguirá opinando desde su torre de marfil?

Para no extendernos, quisiéramos referirnos de manera breve a algunas verdaderas “chicanas universitarias” en las que incurre Cousinet. Ella afirma que esta corriente se subdividió constantemente y no pudo ponerse de acuerdo respecto a casi ningún tema, buscando con esto ridiculizar los importantes debates que atraviesan al trotskismo en la historia argentina, como a cualquier corriente teórico-política que no se erija como un “dogma religioso” sino que busque las vías para intervenir en la realidad. Curiosa intención, sobre todo si tenemos en cuenta que años atrás estos debates, como el de Ramos y Peña fueron parte de la bibliografía de la cátedra de Sociología Política que ella misma dictaba en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales. Un debate apasionante en el cual Peña defiende las ideas del trotskismo de la independencia de clase que debe levantar la clase trabajadora frente a la burguesía nacional y los gobiernos como el de Perón, frente a un Ramos que rompe con el marxismo y se hace peronista (para hacerse neoliberal después). O la discusión entre Moreno y Santucho cuando este último cuestionaba la centralidad de la clase obrera industrial en la revolución y  llamaba a organizar una guerrilla en el norte argentino, ya que preveía que el proletariado azucarero más explotado sería protagonista de la insurrección, un pronóstico que se demostró equivocado con el Cordobazo en 1969, que abrió una etapa de insubordinación obrera y popular en Argentina que no logró ser contenida por el regreso de Perón y tuvo que ser aplastada por la burguesía con la dictadura del `76. Resulta cuanto menos bizarro que minimice los importantes debates en el seno de la izquierda una referente de un movimiento que rompió sucesivamente con el radicalismo, el kirchnerismo, Proyecto Sur y el FAP y en las PASO integró la lista de Julio Cobos; dudamos de que exista en todas estas “rupturas” alguna reflexión estratégica y que no respondan más bien al liso y llano oportunismo. De aquí que para Cousinet la época en que los líderes de masas eran también intelectuales haya pasado, ya que para ella, “las verdades de la teoría” no son iguales a “las verdades de la práctica”.

Los intelectuales “progres” como Padilla y Cousinet, hablan sobre el trotskismo ahora que emerge en la escena política. Se preguntan “¿qué es el trotskismo?” “¿quién vota a la izquierda trotskista?” Asistimos a un “redescubrimiento” y renovado interés por nuestras ideas. Esto desmiente por sí solo la afirmación de Cousinet de que “de toda la izquierda de los sesenta y setenta son [los trotskistas] los únicos que han permanecido sin cambios sosteniendo los dogmas marxistas como verdades intocables y absolutamente inamovibles”. Por el contrario, la actualización del programa de Trotsky nos permitió a los trotskistas del PTS intervenir en la lucha de la fábrica Zanon tras la crisis de 2001, y su gestión bajo control de los trabajadores anda ya por los 11 años; se ha convertido en un símbolo internacional de resistencia obrera frente a la crisis capitalista.

jueves, 15 de agosto de 2013

La elección de la Izquierda en Mendoza y el pensamiento domesticado de Marcelo Padilla


Por Eva Báez

“Una buena elección, nada más”. Así se titula el análisis de un frustrado Padilla sobre la elección del Frente de Izquierda en Mendoza. Evitando hablar demasiado sobre la estrepitosa derrota del kirchnerismo que a nivel nacional no sobrepasó el 26% (por debajo de los pronósticos más pesimistas), Padilla tiene que reconocer el triunfo político del FIT, pero asegurando que este triunfo está siendo aprovechado (y festejado) por la derecha mediática por ser un voto anti-K, producto de “el clima gorila y antiperonista” en la Argentina y sobre todo en la “bienuda” Mendoza.

Padilla nos acusa de ser una izquierda "funcional a la derecha, y elogiada hoy por la derecha”. Sería interesante saber de dónde piensa Padilla que surgieron estos “monstruos” de la derecha nacional y mendocina a la que se supone que somos funcionales, y como se supone que ellos los confrontan, porque, ¿acaso Cobos no fue el exponente de los “radicales K” que acompañaron al kirchnerismo con la fórmula “Cristina, Cobos y vos”? La campaña derechista de mano dura y “tolerancia cero” para los delincuentes, cuyo slogan se disputaban Rosales y Cassia, ¿no tuvo su antecedente en la campaña de Jaque que ganó la gobernación con el “mapa del delito” para combatir la “inseguridad”? ¿Quién puso a Aguinaga al frente del Ministerio de seguridad provincial en 2007 junto al genocida Carlos Rico, desatando un enorme repudio provincial que movilizó a miles el 24 de marzo? Sin duda en este terreno Jaque fue un “precursor” de Cristina que hoy nombra al represor César Milani al frente del Ejército de la Nación, quien visitará la provincia para participar en los actos en homenaje a San Martín acompañado por el “progresista” Agustín Rossi de La Corriente Nacional. A esta derecha, parida por la “transversalidad” K, no se opuso el Frente Para la Victoria: los únicos que denunciamos la campaña de mano dura y criminalización de la pobreza que hizo la derecha, fuimos nosotros (la izquierda). El kirchnerismo que recicló parte del personal político del menemismo y el duhaldismo como Aníbal Fernández y Scioli, o a los ucedeístas Massa y Boudou, es el que recicló, acunó y proyectó la  derecha que hoy se posiciona dentro del peronismo para pelear la sucesión.

¿Quién ha sido entonces “funcional a la derecha”?... ¿La izquierda que escrachó a la embajadora yanky (amiga de Massa) que ordenó la represión en Kraft y a la que Cristina debió pedirle disculpas personalmente? ¿La izquierda que convirtió en una gran denuncia nacional la esclavitud de los niños del Ajo y apoyó a las obreras que sufrieron la muerte de unos de sus compañeros por la represión despiadada del entonces candidato a vicepresidente de Cristina? ¿La izquierda que denunció la esclavitud de las cooperativas truchas en el campo mendocino contra los tractorazos de la Sociedad Rural y la Federación Agraria? ¿O quizá la izquierda que apoyó cada uno de los reclamos de esas maestras ociosas "que trabajan cuatro horas y tienen tres meses de vacaciones". Digamos que como mínimo Padilla debería replantearse si es la izquierda la que padece de "paranoia" (Según la RAE: "Perturbación mental fijada en una idea o en un orden de ideas.") Por que todo indica que más bien con estas vulgares acusaciones que pretende hacernos la puede estar sufriendo él mismo.

Sobre la chicana de kirchneristas varios (y de la derecha misma, como el PD), de que el FIT expresó un voto "bronca" de clase media; nos extraña que para un fanático de los "movimientos populares" no se pregunte ¿a dónde fue el voto de enormes sectores de trabajadores y jóvenes que antes los seguían? ¿Por qué a clase media gorila va a votarnos a nosotros, teniendo excelentes exponentes desde el FAP hasta Cassia, y no lo harían algunas decenas de miles de los más humildes y silenciados de la provincia? ¿El 10% que votó a Alejandro Vilca en Jujuy también es una expresión de la clase media gorila antiperonista? ¿Cómo puede haber hecho que una "buena elección, nada más" de la Izquierda haya convertido a un polemista salvaje como Padilla en un friki?

Lo cierto es que en este “fin de ciclo”, existen fenómenos políticos  muy distintos entre sí, aunque Padilla insista en ponerles entre sí un signo igual. Por un lado está el paso a la oposición de sectores de las clases medias que expresaron los cacerolazos, aunque el último, convocado en el último tramo de la campaña electoral, fue un fracaso. Estas movilizaciones fueron azuzadas por la derecha republicana para instalar algunos de sus caballitos de batalla contra el gobierno, como las denuncias de corrupción contra funcionarios y empresarios K, que debilitaron la credibilidad política del gobierno. Una erosión a la que apelaron las campañas despolitizadas de la oposición patronal, con slogans como el “distinto a todos, igual a vos” del cobismo. Por el otro: mientras el gobierno toma medidas “funcionales a la derecha” (como la de designar a Milani para dirigir el ejército o firmar el acuerdo con Chevron) se desencanta su base progresista; pero además, la persistencia de la inflación, el impuesto al salario y la precarización laboral minan la base social que tenía el gobierno entre sectores de trabajadores que representaron una parte importante del 54% y donde ha perdido millones de votos. El paro del 20N de 2012 convocado por la burocracia moyanista que rompió con el gobierno empezaba a mostrar esta tendencia.

Hace algunos años Padilla decía que la izquierda mendocina siempre “desvarió” entre alianzas políticas oportunistas o un sectarismo dogmático que le impediría “construir una alternativa seria”.  En ese momento nuestro detractor nos acusaba de enfocarnos "exclusivamente  en la acumulación política obrerista", algo que nuestra lucha en el terreno de la lucha por los derechos de las mujeres, la juventud y el castigo a los genocidas desmintió por sí sola. Ahora menciona al pasar nuestros “prejuicios clasistas” algo que al decir verdad nosotros conocemos como independencia de clase, y que nos permitió fortalecernos frente a la deriva de la “izquierda sojera” que apoyó a las patronales agrarias en 2008 y la que se integró al gobierno y su capitalismo de amigos para terminar conformando las "orgitas" que tanto critica este columnista. Padilla nos acusa de “contribuir al establishment” porque éste quiere mostrar un “falso democratismo burgués” que neutralice el “populismo transformador” del kirchnerismo. En realidad, el establishment se sirvió muy bien durante todos estos años del kirchnerismo, que circunscribió su papel “transformador” a los límites de la miseria de lo posible, al “nunca menos” siempre y cuando no significara tocar los grandes intereses del agropower, las multinacionales, la Iglesia…como detallamos mejor acá. Ni una sola de estas denuncias es levantada en forma consecuente por los “funcionales” intelectuales K.

Las propuestas que levantamos desde el FIT que los legisladores ganen como un trabajador, por la nacionalización de los recursos naturales como el petróleo y el gas, por impuestos progresivos a las grandes fortunas, además de los derechos democráticos para los sectores oprimidos como las mujeres, la comunidad LGTB, los inmigrantes, la juventud, forman parte de un programa transicional para desarrollar la movilización de los trabajadores y de la juventud. Ni No tenemos, como plantea Padilla, una posición anti-parlamentaria, sino que, como mostramos en la práctica con el diputado obrero del Frente de Izquierda Raúl Godoy, en la provincia de Neuquén, apostamos a que los trabajadores no opten por las alternativas patronales, sino por una propia, que puede tener una tribuna en el parlamento, pero cuyo objetivo es desarrollar una fuerza militante en las fábricas y lugares de trabajo, entre la juventud y los sectores populares.  Apostamos a seguir desarrollando esta militancia y a conquistar una banca en el Congreso en octubre, que sea una tribuna de referencia de los luchadores obreros y populares y del pueblo trabajador.

"En la vida, hay que elegir" Algunos cientos, quizá unos miles militarán en Octubre para envíar al Congreso el primer diputado de la izquierda trotskysta en la historia de Mendoza. Otros militarán para que entre al congreso el derechista Omar Felix, hijo del genocida Chafí Felix, serán "funcionales a esa derecha y elogiados por esa derecha". ¿Y Padilla por quién se la jugará en esta contradicción principal? 75.000 ya lo hicieron por Nicolás del Caño, nada más... y nada menos.

sábado, 27 de julio de 2013

Julio Rudman: Un progre K ofuscado ¿con quién?

Por Eva Baez

En un reciente post en su blog Caramelos ácidos, el periodista mendocino Julio Rudman embiste contra nuestro candidato por el Frente de Izquierda en Mendoza, Nicolás del Caño, que en una entrevista en Diario Los Andes dijo que "de conjunto, el kirchnerismo no tomó medidas integrales a favor de la mayoría del pueblo trabajador". Una afirmación para el periodista tan disparatada que ni siquiera se hace necesario nombrar tales medidas integrales.

Rudman se pregunta “¿qué es [para la izquierda] un análisis de conjunto?” (pasaremos por alto por esta vez los epítetos despectivos, para responder esta “duda”). Un análisis de conjunto, es el que propone el mismo gobierno nacional proclamar “una década ganada”. Lo que el kirchnerismo presenta, con un discurso de ribetes desarrollistas, como “ganancias” de la década para los trabajadores y sectores populares: es decir, la creación de nuevos puestos de trabajo, el crecimiento económico –hasta que golpeó la crisis internacional en 2008- y los subsidios como la Asignación Universal por Hijo; tienen su contracara en la persistencia y aun la profundización de pilares fundamentales del neoliberalismo menemista: los índices de crecimiento económico aumentaron de la mano de la sojización y el fortalecimiento del agropower.  Mientras que de los cinco millones de nuevos puestos de trabajo, más de la mitad son en condiciones precarias, tercerizados o bajo distintas formas de flexibilización laboral (pilar menemista si los hay); y para quienes trabajan en blanco, el impuesto a las ganancias viene a licuar el salario carcomido por la inflación. De la misma manera, la participación de los asalariados en la renta nacional no sólo no mejoró con respecto a los niveles del 2001, sino que decayó. La AUH representa menos del 1% del PBI, en tanto que el pago de la deuda externa se llevó aproximadamente un 10% del PBI anual entre 2005 y 2012. No hace falta decir que el pago de la deuda fue presentado siempre por los Kirchner como un “logro”, lo mismo que las millonarias ganancias empresarias; cuando, muy lejos de haberse desarrollado una supuesta industria nacional, dos tercios de las principales 500 empresas en Argentina pertenecen a capitales extranjeros. Y las principales concentraciones de tierra siguen en manos de la rancia oligarquía de los Martínez de Hoz, los Blaquier, etc., y de las grandes exportadoras como Bunge, Monsanto, Cargill. Esta sería una escueta explicación de por qué consideramos que el gobierno, en “un análisis de conjunto”, no ha tomado medidas integrales (o estructurales) que vayan contra la herencia neoliberal y a favor del pueblo trabajador, sino que se ha servido de ella para beneficiar a sus capitalistas amigos. Para no hablar del transporte público, la vivienda o el ordenamiento urbano... desastres "estructurales" que han devenido en verdaderos crímenes sociales de este gobierno (Once, Indoamericano, Inundaciones) que no se olvidarán. Será por ello que muchos no consideran para nada disparatado que nuestros spots planteen terminar con la casta de políticos millonarios, con el trabajo precarizado y en negro, contra los impuestos que revientan los ingresos del pueblo trabajador mientras los millonarios no pagan un solo peso.

Menos aún en una coyuntura donde Cristina le entrega en bandeja los recursos petroleros a la multinacional yanqui Chevron; al “estercolero del mundo”, que efectivamente nos infecta, pero de una manera bastante más literal: con el Fracking, “el gran salto hacia adelante” del modelo. Para no tomar verdaderas grageas ácidas como la Megaminería que proyecta el kirchnerismo en Mendoza. ¿Dónde quedó la “soberanía nacional” que esgrimían los K alentados por la “nacionalización” del 51% de YPF?

Dejemos acá, y evitemos entrar en los innumerables escándalos de corrupción –que ahora tienen como centro al vaciador Ricardo Jaime, responsable junto al gobierno de las masacres en el Sarmiento; o la designación y defensa del genocida César Milani al frente del Ejército.

Y sin embargo Rudman prefiere –inspirado por algún tachero facho de la Capital Federal- ver el "conservadurismo" en la izquierda que, según él, “repite el mismo discurso desde 1905”. Le respondemos que nuestro “conservadurismo” viene, en todo caso, desde un poco más allá por 1871, cuando la gloriosa Comuna de París proclamó el primer gobierno obrero de la historia y echando por tierra los privilegios de los políticos burgueses, declaró que ningún funcionario podía cobrar más que un trabajador. Efectivamente, desde el Frente de Izquierda retomamos esta tradición revolucionaria, porque como Rodolfo Walsh supo decir:“nuestra clase dominante ha procurado siempre que los trabajadores no tengan historia, no tengan héroes ni mártires. Las experiencias colectivas se pierden, las lecciones se olvidan. Cada lucha debe comenzar de nuevo, separada de la anterior. La historia se convierte así en propiedad privada, cuyos dueños son los dueños de todas las otras cosas”.

Si nosotros, por intentar recuperar las enseñanzas de una tradición revolucionaria diezmada por la burguesía –con la inestimable ayuda del stalinismo, donde supo militar Rudman- somos "conservadores": entonces, cuando vemos, al calor de la crisis internacional, que estas ideas revolucionarias vuelven en las juventudes que ocupan las calles en Brasil, Turquía, Egipto, Chile… ¿Qué pensará Rudman? ¿Que son jóvenes conservadores?

El verdadero conservadurismo (de los intelectuales K) es cerrar los ojos, en función del “relato”, a la realidad de que el gobierno nacional se sostiene sobre la alianza con los barones del conurbano, gobernadores como Isfrán o Urtubey, y burócratas sindicales de la calaña del “601” Gerardo Martínez. Antes de intentar ridiculizar a la izquierda, sería bueno que Rudman tuviera en cuenta lo que se preguntan sus propios compañeros. Por ejemplo, mientras él “entiende muchas cosas” mirando el caudal electoral del FIT, Follari (disertando junto a Laclau en la Facultad de Ciencias Políticas) explicaba que “tragar sapos” como los del PJ, era inevitable para estar donde están, ya que si el progresismo K se presentara solo en las elecciones, probablemente sacaría “menos votos que la izquierda” (algo que se ve que Cousinet aprendió muy bien). Después de todo: ¿qué resultados esperaría este periodista del kirchnerismo “puro” sin las alianzas con los conservadores locales que ganaron la interna de la mano de Ciurca? Marcelo Padilla, por ejemplo, se lamenta de que a éste no haya nada que oponerle salvo “orguitas de 35” y “10 agrupamientos atomizados que se dicen Unidos y Organizados”. Por último, entre los intelectuales de Carta Abierta (ver, en Carta Nº 13, titulada “Los Justos” su propósito de sostener al gobierno K frente a una “sutil forma de golpismo [que] opera todos los días”) empiezan a verse las crisis desatadas con la designación del golpista Milani y un gobierno arrodillado ante el purificado Francisco I (
si esto no es conservadurismo, ¿qué es?). El progresismo K ya no puede estar tan seguro de que su gobierno y los sapos de su barriga no puedan devenir en una fuerza bastante más “conservadora” que la izquierda que tanto repelen.

jueves, 4 de julio de 2013

Conferencia de Prensa Frente de Izquierda. Presentación lista de candidatos en Mendoza.

Conferencia de Prensa Frente de Izquierda

Presentación oficial de la lista del Frente de Izquierda y de los Trabajadores en  Mendoza.

Este viernes 5 de julio a las 17hs. en el Bar Quinta Norte (Mitre y Espejo de Ciudad), el Frente de Izquierda y de los Trabajadores (FIT), realizará la  presentación  de sus candidatos  para las próximas elecciones primarias del 11 de agosto.
En la Capital Federal Jorge Altamira encabeza la lista de Diputados Nacionales y el “metrodelegado” Claudio Dellecarbonara la de Senadores, mientras que en la Provincia de Bs. As. Néstor Pitrola será candidato a  Diputado Nacional y Christian Castillo irá por una banca en la Legislatura  Bonaerense.

En Mendoza el FIT será la lista 502. El  primer candidato a Diputado Nacional  Nicolás del Caño aseguró que: “es muy importante la unidad alcanzada en la provincia y a nivel nacional, nuestro primer desafío será  superar las PASO como ya lo hiciéramos en 2011 para poder pelear en octubre por bancas en el Congreso, la Legislatura, y los Consejos deliberantes”.
Soledad Sosa candidata en segundo término a Diputada Nacional señaló que  “contra los partidos de siempre que han gobernado para los grandes empresarios locales o extranjeros, somos una alternativa para miles de trabajadores y jóvenes de Mendoza que no aceptan  los bajos salarios, la precarización laboral y la desocupación”.  
 

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martes, 28 de mayo de 2013

El control de precios de La Cámpora: otra estafa “nacional y popular”.

(Mza 29-05-2013) El pre-candidato a Diputado Nacional por el Frente de Izquierda y de los Trabajadores (FIT), Nicolás del Caño, realizó declaraciones sobre los anuncios de la Presidenta de que militantes de la Cámpora y organizaciones afines al Gobierno realicen recorridas por supermercados y almacenes para que se respeten los precios congelados en los productos de la Canasta Básica.
Respecto al tema, el joven dirigente del Partido de los Trabajadores Socialistas (PTS) dijo que “es una burla el anuncio de Cristina Fernandez de Kirchner, de que   la agrupación La Cámpora , conducida por funcionarios que ganan 50 mil pesos vaya  a  ‘cuidar’ el bolsillo del pueblo.  Aquellos que apoyan a un Gobierno que niega la inflación a través de las estadísticas truchas del INDEC de Moreno, no pueden ser los mismos que controlen los precios”.  Además agregó  que “los 500 productos que anunciará el Gobierno se van a congelar sobre la base de una inflación que aumenta a ritmos muy superiores a los salarios. Por eso hay que partir de fijar un salario igual a la canasta familiar indexado a la inflación y formar comités de trabajadores y vecinos votados en las fábricas, escuelas y barrios  que puedan ejercer un control verdadero sobre las grandes cadenas de supermercados que se llevan ganancias millonarias a costa del
bolsillo del pueblo trabajador"
Por último el ex candidato a Gobernador  señalo que “este control no puede quedar en manos de un Gobierno que aplica medidas contrarias a los intereses de las mayorías populares como  los topes en las paritarias,  el impuesto al salario y el trabajo precario”.


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viernes, 24 de mayo de 2013

Comunicado de prensa. Frente de Izquierda y de los Trabajadores (FIT)


(Mza, 24-05-2013). Ante la ratificación de los dichos del Gobernador de Córdoba  José Manuel De La Sota , quién vuelve a insistir con la rebaja de penas para los genocidas, el Precandidato a Diputado Nacional por el Frente de Izquierda (FIT) y dirigente del Partido de Trabajadores Socialistas (PTS) Nicolás del Caño, declaró: “lo que busca De La Sota es un nuevo indulto para los genocidas. No nos extrañan sus afirmaciones, es el mismo que dijo hace unos años que ‘las madres deberían haber cuidado mejor a sus hijos’; hoy pide reconciliación con los genocidas. DLS también fue señalado por testigos como miembro de los comandos civiles de la derecha peronista, que derrocaron al entonces Gobernador de la provincia mediterránea Obregón Cano en el año 1974” . Además agregó que “Para que haya justicia tienen que ir presos todos los genocidas, no sólo un puñado de ellos como sucede hoy después de 30 años. También  deben ser juzgados los cómplices civiles, eclesiásticos y políticos”.
 En la década  Kirchnerista, que también podríamos llamar la década engañada de los derechos humanos, aún no se han abierto todos los archivos de la dictadura  que  permitirían conocer una gran parte de la verdad que aún sigue oculta gracias a los partidos tradicionales como el PJ y la UCR , que le aportaron cientos de intendentes a la dictadura de Videla y hoy se niegan a este pedido de los organismos de Derechos Humanos no oficialistas.
Por eso ante las declaraciones de  De La Sota ratificamos:¡¡Que no olvidamos, no perdonamos y no nos reconciliamos!!

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miércoles, 6 de marzo de 2013

Latinoamérica y la muerte de Hugo Chavez



Acompaño con respeto la congoja de millones de latinoamericanos por la muerte del líder bolivariano. Millones identifican sus conquistas y los beneficios sociales logrados en la última década con el liderazgo de su presidente.
Chavez entró en escena en uno de los momentos bisagra de Latinoamérica. Su presidencia se anticipó a una de las oleadas más importantes de las últimas décadas contra los gobiernos neoliberales que surgieron tras la contrarrevolución sangrienta de las dictadura genocidas. Las jornadas del 2001 en Argentina, Bolivia desde la guerra del agua al Octubre del 2003, y los sucesivos levantamientos en Ecuador, fueron las acciones independientes de masas más emblemáticas del giro a izquierda que emprendía la región de conjunto en los comienzos del sXXI.

Frente a este fenómeno, Chavez fue uno de los principales arquitectos de las políticas que canalizaron las aspiraciones de millones de pobres, trabajadores y campesinos, hacia el apoyo de candidatos y gobiernos que reconstruyeron la autoridad estatal de las clases dominantes desplazando a los plumíferos del consenso de Washington, y renegociando su sumisión a las empresas y capitales imperialistas con mejores márgenes de negociación: "el socialismo con empresarios". Y fue, dentro de éstos líderes (Lula, Kirchner, Evo Morales...), el que más fricciones tuvo con el imperialismo que intentó derrocarlo con un golpe de estado en el 2002, y que le hizo numerosos boicots como el lock out petrolero del 2003. Reconstruyó el régimen capitalista en Venezuela, barriendo con la constitución bolivariana lo que quedaba del podrido régimen del "Pacto del Punto Fijo", su apoyo fueron siempre una fracción importante de las FFAA y los sectores más empobrecidos de la población. Luego de que las masas movilizadas derrotaran el intento golpista del 2002 y proyectaran a Chavez como líder regional, a la infantil ilusión zapatista de las nuevas generaciones de la izquierda latinoamericana, de cambiar el mundo sin tomar el poder, Chavez le birló la mayor parte de su base y ganó mucha más adhesión en las masas, con el llamado a construir el socialismo del sXXI desde el mismo estado, y con los mismos empresarios.

Su muerte se da en medio de una importante incertidumbre por el fortalecimiento de las derechas escuálidas en la región, y en la propia Venezuela detrás de Capriles. Sus partidarios lo comparan con Bolívar, San Martín y otros próceres de la independencia latinoamericana. Esta postal extemporánea apunta a reforzar la ideología nacionalista sobre la que sus seguidores intentarán mantener la unidad nacional desde el régimen que heredan, sin que esto implique resignar la feroz disputa de sucesión y cuotas de poder dentro del propio régimen chavista. Pero lo cierto es que sus acciones y su rol en la historia están muy lejos de la de estos libertadores y sus gestas militares. Sus políticas en realidad se han asemejado más a los líderes latinoamericanos del sXX, como Perón, Vargas o Cárdenas, cuyos gobiernos fueron desplazados una vez que su función -como mediadores entre el imperialismo y las masas- dejó de ser útil a las burguesías autóctonas y las potencias imperialistas que se jugaban los intereses en la región, y sus regímenes fueron derrocados o reformados a su favor.

Se confunden quienes creen que Chavez muere como un revolucionario socialista. El ejemplo de la revolución cubana y el sacrificio del Che Guevara radicalizaron a cientos de miles de jóvenes en el mundo, fue un llamado al combate contra el imperialismo, las burguesías autóctonas y su estado, a la lucha por la revolución socialista aún cuando su estrategia era radicalmente equivocada. La herencia de Chavez es, por el contrario, un llamado a organizarse en los márgenes del estado y su burocracia, y a disciplinarse a gobiernos de centroizquierda como el kirchnerismo. Un ejemplo que en vida llevó hasta el final: sin destruir el dominio de clase de los explotadores en Venezuela, sin proponerse destruirlo en otros países, y aún promoviendo una resistencia pasiva de las masas y negociaciones "desde arriba" (UNASUR) allí donde sus aliados fueron derrocados por la maquinaria estatal pro imperialista: Honduras y Paraguay.

Chavez muere como un líder popular de su etapa: la de la conciliación de clases pos-neoliberal, y difícilmente tenga superadores en la misma; todos los que le han seguido (Correa, Ortega e incluso Evo) se han parado a su derecha, al igual que las últimas acciones de sus herederos devaluadores. Su remembranza seguirá generando ilusiones en lograr conquistas perdurables reformando los estados semicoloniales hasta que las masas deban defender sus logros y derechos conquistados retomando el camino de las acciones independientes; y la clase obrera vuelva a forjar sus propias aspiraciones revolucionarias, su propio partido, sus propios líderes y sus propios triunfos, retomando las mejores tradiciones de sus gestas en la historia latinoamericana e internacional.

viernes, 1 de marzo de 2013

EL PTS se movilizará en el Carrusel Vendimial .


COMUNICADO DE PRENSA.

(Mza, 01-03-2013) El dirigente del PTS y ex candidato a Gobernador por el Frente de Izquierda y los Trabajadores (FIT) Nicolás del Caño señaló: “mañana a las 8hs.  desde la plaza Italia nos movilizaremos junto a miles de jóvenes y trabajadores en el Carrusel Vendimial en la denominada “Contra marcha” que se realiza desde hace más de 5 años, para seguir reclamando el fin del saqueo y la contaminación que busca imponer el gobierno con  la Megaminería” y sostuvo que  “mañana también vamos a acompañar el reclamo de los trabajadores de la educación que están convocando a movilizarse contra las maniobras de la conducción del SUTE que levantó el paro de 72hs. votado en las escuelas.” El joven dirigente de la Izquierda mendocina agregó: “los gobiernos  de CFK y de  Paco Pérez  quieren aplicar las recetas de ajustes que vimos en los 90’, con techos salariales impuestos por decreto inferiores a la inflación real. Los trabajadores tenemos que exigir lo que es nuestro,  un salario igual a la canasta familiar, el fin del impuesto al salario, la equiparación de las asignaciones familiares y otras demandas”.  Luego afirmó que  “levantaremos la voz de la otra Vendimia, esa en la que trabajan miles en las condiciones más terribles de explotación, en negro, a través de las cooperativas truchas, donde el trabajo infantil y salarios de miseria son utilizados por los empresarios para enriquecerse”.  Por último, aseguró que “es un fraude que el Gobernador y sus funcionarios se aumenten el sueldo en un 50% y diga a los trabajadores que hagan un esfuerzo y se conformen con un 20% en cuotas. La ley que presentó el diputado del FIT Raúl Godoy en la legislatura de Neuquén para que los legisladores ganen lo mismo que una maestra de grado con 20 años de antigüedad es un ejemplo a seguir”.